Tres o cuatro acordes son suficientes para hacer un tema de Pájaros Vampiro. La intención nunca fue hacer arte, sino hacer ruido y hacerlo bien. Lo que empezó como una excusa para pasar el tiempo de dos jóvenes adolescentes que se conocieron por el skate y su afición por los primeros discos de Green Day y The Clash, pasó de ser un pasatiempo a una carrera casi de tiempo completo. Con solo 17 años, Hugo y Abraham empezaron a hacer música mientras iban en patineta y jugaban al Rock Band. Edi apareció para juntarse como guitarrista y grabar “Miedo y Deseo”, el primer EP de Pájaros Vampiro, en un estudio casero. Fue un disco de punk sucio, con letras que hablan sobre ser joven en la ciudad más grande del mundo y estar enojado aunque sin saber bien con quién. Este sirvió como plataforma para empezar a girar de manera muy precaria y compartir escenario con las bandas de punk mexicanas que admiraban en sus principios. Más tarde, grabaron su segundo EP, “Buscando Rebeldía”, producido por Toño Montes de Los Románticos de Zacatecas. Con este material, la banda pasa de tener un sonido lo-fi accidental a uno intencional. Este disco tiene un enfoque más pop pero sin dejar el garage de lado, canciones muy sencillas con riffs repetitivos y divertidos. Fue aquí cuando Pájaros Vampiro deja de ser tomada como una banda de niños punks y empiezan a ser notados por revistas como Rolling Stone y consiguen su primer contrato discográfico con La Bestia Sello. Después de esto, Pájaros Vampiro se enfocó más en los shows en vivo que en las grabaciones. Era difícil encontrar carteles de shows DIY en los que no estuviera su nombre. Durante este periodo solo grabaron tres sencillos: “Algo Bien”, “Soy Basura” y “Amarres de Amor Reales”. Estos no forman parte de ningún disco o EP, pero sirvieron para mantener vigente a la banda en el underground de la ciudad, girar y poder compartir escenario con grupos como Mujeres, Carolina Durante, Boom Boom Kid y Cala Vento. La historia tiene un nuevo comienzo en 2022, después de algunos cambios de alineación. Milo, quien a veces suplía al anterior bajista Alex en shows en vivo, se integró oficialmente como bajista. Y es así como Pájaros Vampiro, es decir, Hugo, Abraham, Edi y Milo, firmaron con Sonido Muchacho en 2023 para nadar contra corriente en la escena del rock mexicano