Kokoshca han decidido que 2021 era el año de pegar el puñetazo, de mirar a los ojos, y de decir: “aquí está KOKOSHCA“. Han tenido que pasar seis discos para que el golpe en la mesa removiese los cimientos de una escena que tenía que despertar, y confirmar a los de Pamplona como la gran banda que siempre fueron.
Nadie puede dudar, a estas alturas, de que Kokoshca se ha convertido en uno de grupos más sorprendentes y personales del rock ibérico; siempre a la vanguardia de nuestra música, explorando distintas fórmulas para componer canciones precisas, afiladas, y con un imaginario propio. Ahora, al fin podemos decir que ha llegado el momento de la consagración, que ha llegado el momento de “KOKOSHCA”: su sexto largo es una declaración de intenciones que se presenta con un sonido más cuidado e inmediato (todo ello gracias a la producción de Raúl Pérez en La Mina), y un cancionero apabullante que homenajea al rock, al pop, y a la canción en castellano. Una colección de hits definitiva dispuesta a abrazar a un público más amplio, pero sin olvidar la esencia de los comienzos. Kokoshca es, y siempre será, Kokoshca.
“Asia (canción para Iñaki Ocho de Olza)” es el tercer single de los Kokoshca, que llega tras “Himno de España” y de “Regresando a la ciudad”. La canción más bonita del año es un homenaje a Iñaki Ochoa de Olza, famoso montañero de Pamplona que murió en la pared sur del Annapurna. Un himalayista místico y punk, fan de Bob Dylan, escritor y un alma libre. Cariño, admiración, y pelos de punta. Siempre Kokoshca.